Hace poco leí que te puedes enamorar de alguien con treinta y seis preguntas y me pareció muy curioso, porque resulta bastante asombrosa la capacidad del ser humano de enamorarse, de coger cariño y querer a alguien, lo rápido que puede llegar a suceder, tan rápido que cuándo quieres darte cuenta ya tienes las mariposas en el estómago y la sonrisa de felicidad en la cara, sin embargo, el desenamorarse o dejar de querer a alguien es un proceso lento y doloroso, deberían existir las treinta y seis preguntas o respuestas para dejar de querer a alguien, que fuera tan tan rápido como el aleteo de una mariposa, que un día te levantaras y esa canción que te recuerda a esa persona no signifique nada, que vuelvas a tener mariposas en el estómago debido a la ilusión de tu propia felicidad, que puedas caminar por la calle sin echar en falta darle la mano a alguien....en estos momentos me viene a la cabeza la teoría de la relatividad de Einstein:
"La localización de los sucesos físicos, tanto en el tiempo como en el espacio, son relativos al estado de movimiento del observador". Como podemos ver que cuando estamos bien el tiempo pasa demasiado rápido y cuándo estamos mal los días son eternos y los pensamientos gigantes, y en ese momento ves el aleteo de una mariposa a cámara lenta....
"La localización de los sucesos físicos, tanto en el tiempo como en el espacio, son relativos al estado de movimiento del observador". Como podemos ver que cuando estamos bien el tiempo pasa demasiado rápido y cuándo estamos mal los días son eternos y los pensamientos gigantes, y en ese momento ves el aleteo de una mariposa a cámara lenta....
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