Nos conocimos en el momento menos adecuado, quizás si nos hubiésemos conocido en otra época hubiésemos podido apagar el fuego, darnos besos por las esquinas y llegar a casa encendidos de fiebre por un calentón adolescente.
¿Qué día fue el que cambiamos? Cómo de la noche a la mañana pasamos de todo a nada mientras la necesidad seguía dentro de nosotros, y es que la droga no se puede dejar de un día para otro, hay que desintoxicarse porque yo aun recuerdo tus manos expertas dentro de mi y tu aliento sobre mi piel....
Ven, vamos a perdernos otra vez, echemos un pulso al destino que nos unió en el momento equivocado, pongamos las reglas nosotros, nos estamos perdiendo un sexo muy bueno.
Comentarios
Publicar un comentario